El Superior General de la Compañía de Jesús, el P. Arturo Sosa SJ ha destacado hoy la importancia esencial que tuvo para la Compañía de Jesús, la Iglesia y el mundo la experiencia que Ignacio de Loyola vivió, hace 500 años, en la ciudad de Manresa.
“Tantos rasgos de la Compañía de Jesús y de lo que hoy conocemos como espiritualidad ignaciana dependen de Manresa”, ha dicho durante la Eucaristía que ha presidido esta tarde en el Santuario de la Cueva de San Ignacio, durante la cual se ha abierto la Puerta del Jubileo. Con este gesto Manresa se suma al Año Ignaciano #Ignatius 500 que conmemora el 500 aniversario de la conversión de Ignacio y de su llegada a la ciudad de Manresa.
La Eucaristía ha sido concelebrada por el Superior Provincial de la Compañía de Jesús en España, el P. Antonio España SJ y el Superior de los Jesuitas en Manresa, el P. Lluís Magriñà SJ. El P. General también ha estado acompañado por su Asistente para la Europa Meridional, el P. Cipriano Díaz SJ. El acto ha contado con la presencia de diversos representantes institucionales, entre ellos, el Alcalde de Manresa, Marc Aloy, la Consellera de la Presidència de la Generalitat de Catalunya, Laura Vilagrà, y la directora general d'Afers Religiosos, Yvonne Griley.
Durante la Eucaristía el P. Arturo Sosa SJ ha realizado la bendición de los mosaicos que visten el Santuario desde hace pocos meses. Una obra artística impresionante de más de 550 metros cuadrados. El Padre General ha pedido que esta obra de arte, formada por piedras procedentes de todo el mundo sea una oportunidad de diálogo y reconciliación.
En su homilía, el Superior General de los Jesuitas ha asegurado que el libro y la experiencia de los Ejercicios Espirituales “es seguramente lo mejor que los jesuitas y los herederos y amigos de esta espiritualidad podemos ofrecer a otros” y ha recordado que precisamente su origen e inspiración se encuentra en la estancia de Ignacio en Manresa.
El P. Arturo Sosa SJ ha destacado la importancia que sigue teniendo hoy la propuesta de los Ejercicios Espirituales y por tanto, la necesidad de impulsar su práctica, conocimiento y renovación, porqué “siguen vigentes hoy más que nunca”, ha dicho.
El peregrino que llegó como un mendigo
El máximo responsable de los jesuitas también ha recordado que esta experiencia no se puede entender sin fijarnos en cómo Ignacio llegó a Manresa. Lo hizo como un mendigo que vivía de de limosnas, ya que había renunciado a todos sus bienes para poder seguir a Jesús y se presenta sin ninguna seguridad y viviendo como nunca la pobreza espiritual y material. “No cabe duda que esto le transforma”, ha dicho el P. Sosa, “y su modo de vivir aquí se convierte en un punto de referencia de nuestras necesidades espirituales y materiales y del modo en que las satisfacemos”.
Y es en Manresa también donde resulta “un primer modelo de acompañamiento que reiterará Ignacio a lo largo de su vida”, en el intercambio con otras personas, pobres como él, niños, hombres y mujeres que viven en la ciudad, religiosos y sacerdotes… Acompañamiento a través de la conversación que se convierte en un elemento imprescindible en la misión de la Compañía de Jesús, y que “sigue siendo un instrumento excelente que tenemos en nuestras manos”.
Ha sido en la parte final de la celebración que se ha hecho la apertura de la Puerta del Jubileo. Se trata de la puerta que daba acceso a la Santa Cueva desde 1625 y a lo largo de tres siglos, hasta principios del siglo XX. Ahora está situada en el espacio de acogida que une el Santuario y la Cueva. Una vez abierta, algunos de los asistentes han podido cruzarla, tal como podrán hacer a partir de hoy y durante un año los peregrinos y las personas que visiten el Santuario. Es un gesto sencillo pero cargado de simbolismo, ya que es signo de reconciliación con uno mismo, con Dios y con los demás.
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El acto se ha retransmitido en directo y se puede recuperar el vídeo aquí.