El pasado domingo 17 de octubre Pau Vidal SJ pronunció sus últimos votos. Lo hizo acompañado por la familia, amigos y amigas, y compañeros jesuitas, bajo los árboles junto al Casal Arrupe, en Sant Cugat del Vallès, donde desde hace un año y medio convive una comunidad de hospitalidad impulsada por Migra Studium.
La celebración, cercana, vivida y participada, transmitió en todo momento el espíritu de proximidad y compromiso que Pau contagia y con el que afronta todos aquellos proyectos en los que ha estado implicado a lo largo de su vida como jesuita. 21 años después de entrar en la Compañía de Jesús, "tiene sentido volver a decir que sí", decía el domingo. Y por eso hizo la lectura de los últimos votos ante el delegado de los jesuitas en Cataluña, Enric Puiggròs SJ, que los recibía en nombre del P. General de la Compañía de Jesús.
El mismo Enric Puiggròs explicaba qué representan los últimos votos en el itinerario de un jesuita. "Es el momento en que es la misma Compañía de Jesús que le pide que haga estos votos y se incorpore plenamente". Unos votos que, en definitiva, quieren decir poner la misión en el centro de la vida.
Pau Vidal también quiso compartir algunas impresiones de su camino a lo largo de estos 21 años de jesuita, y destacó el paso del voluntarismo a la vulnerabilidad, así como también la importancia de la comunidad, que quedó subrayada no sólo con las palabras, sino con el espacio escogido para la celebración, y la misma presencia de todas las personas que participaron. Y en todo esto, quiso destacar en Pau, la centralidad de Jesús.
"Poder celebrar los últimos votos el Casal Arrupe, en Sant Cugat, donde desde hace un año y medio un grupo de personas muy comprometidas hacen posible esta comunidad de hospitalidad, es un regalo", nos explicaba Pau antes de la celebración. "Cada domingo nos reunimos una pequeña comunidad cristiana, bajo los árboles, para recordar la vida de Jesús, compartiendo los ecos de las lecturas y animándonos mutuamente a ofrecer más acogida incondicional a los que han venido de otras tierras. Ojalá siempre podamos vivir abiertos, a la intemperie y disponibles ".
También se hizo presente a lo largo de la mañana del domingo el vínculo especial con el continente africano, sobre todo a través de las palabras de Àlvar Sánchez SJ, compañero de Pau en la etapa que ambos pasaron en África trabajando con el JRS.
Pau Vidal es arquitecto y teólogo. Ha trabajado con el Servicio Jesuita a Refugiados en Liberia, en Nogales (en la frontera entre Estados Unidos y México), en Kenia y en Sudán del Sur. Ahora, en Barcelona, trabaja en la Fundación Migra Studium dentro del proyecto de hospitalidad de acogida a personas migrantes y refugiadas. También desde hace un año es el coordinador del área de espiritualidad de Cristianismo y Justicia (EIDES).
"Después de 21 años desde que entré en el noviciado", dice ahora, "habiendo podido vivir y compartir con muchas personas de todas partes y de manera especial durante los 8 años en varios países de África, sólo puedo agradecer todo lo que Dios ha hecho en mi vida, a pesar de mis carencias y límites. Los últimos votos son la ocasión de celebrar en comunidad que Dios me invita y nos invita a todos a vivir desde el servicio y la alegría".
Aquí tenéis algunas imágenes de la celebración. También podéis ver más en este enlace.
