Esta madrugada ha muerto en Sant Cugat del Vallés, el P. Ignasi Vila Despujol, jesuita, historiador, maestro y escritor.
Nacido en Barcelona el 8 de septiembre de 1934, entró en el noviciado de la Compañía de Jesús en Veruela en 1951, hasta el 1953. A partir de entonces siguió su formación como jesuita en Raimat (Lleida) y en Sant Cugat , donde hizo estudios de Filosofía y Teología.
En 1964 se ordena sacerdote en Sant Cugat y en 1969 hace los últimos votos en la Compañía de Jesús en Barcelona.
A partir de 1966 y hasta el 2014 es profesor en el colegio San Ignacio de Sarrià, en Barcelona, del que había sido también alumno y donde desarrolla una larga trayectoria como educador, siendo profesor de diversas materias: historia, cultura griega y latina, sociología, geografía, religión...
En la escuela ocupó diversos cargos directivos y también dentro de la Compañía de Jesús fue consultor provincial de educación y posteriormente miembro del patronato de la Fundación Jesuïtes Educació.
Ha vivido la educación como una vocación y un proceso de aprendizaje continuo. En 2016, en una mesa redonda con motivo del 120 aniversario de la escuela San Ignacio, señalaba el respeto, el discernimiento, la lucidez y la confianza como las actitudes profundamente educativas que deben marcar la relación entre maestro y alumno, porque son también valores profundamente humanos.
Paralelamente a su dedicación como profesor ha desarrollado su labor como historiador e investigador, en la que destaca sobre todo por su investigación y estudio de la historia de la Compañía de Jesús en Cataluña y que ha tenido como resultado la publicación de varios libros, entre ellos, La Compañía de Jesús en Barcelona en el siglo XVI, del año 2010; Los jesuitas en la Rambla de Barcelona, publicado por la editorial Claret en 2013, y La Compañía de Jesús en Barcelona (1600-1659), del año 2018.També es autor de la historia del colegio San Ignacio que se publicó con motivo del centenario de la escuela, en 1995: San Ignacio (Sarrià). Historia de un colegio centenario.
Esta intensa actividad en el ámbito educativo e intelectual la ha combinado con la tarea pastoral como sacerdote jesuita, sobre todo en el acompañamiento espiritual de muchas personas. También como catequista o coordinador de pastoral en la escuela, colaborando en las parroquias San José Obrero y San Pedro Claver de Barcelona, asistente de la CVX Berchmans, así como muchas otras actividades e iniciativas.