El domingo 23 de marzo en Manresa, el jesuita Alejandro Labajos pronunció sus últimos votos en la Compañía de Jesús. El encargado de recibir los votos fue el Superior Provincial de los Jesuitas en España, Enric Puiggròs, y en la celebración, Alejandro estuvo acompañado por un buen grupo de familiares, compañeros y amigos de diferentes puntos de España que quisieron estar presentes.
La celebración de los últimos votos es un hito importante para los jesuitas. Es un momento en el que la propia Compañía de Jesús le pide que haga estos votos y se incorpore plenamente. Supone confirmar y renovar la promesa realizada en el momento de ingresar. “Los votos son alianza y misión”, decía el Provincial Enric Puiggròs, un momento en el que “la Compañía de Jesús se reafirma como compañera de camino, abrazando fortalezas y debilidades”.
Alejandro realizó la lectura de los votos y, al final de la celebración, dirigió unas palabras muy especiales a todos los asistentes, haciendo un símil con el mundo del fútbol para compartir algunas impresiones de su camino a lo largo de 29 años como jesuita. “Vibro con estos colores”, decía, celebrando que “es una alegría y un privilegio formar parte de este equipo”. Sus palabras también estuvieron llenas de gratitud, tanto hacia el Provincial que recibió los votos, como hacia su familia, sus compañeros jesuitas y también a la comunidad de Manresa por la acogida recibida.
Este extremeño de 47 años es licenciado en Humanidades y Musicología por la Universidad de Salamanca y en Teología por la Universidad Pontificia Comillas. Actualmente, forma parte del equipo del Centro de Espiritualidad de la Cueva de San Ignacio de Manresa. Formado en el campo de la música y las artes, Alejandro combina la dedicación a la espiritualidad y el acompañamiento con su faceta artística, como muestro el icono que él mismo pintó para la celebración de estos últimos votos.
Podéis leer su testimonio en este enlace.