Una visita a Montserrat ha completado, hoy domingo, el recorrido que el Superior General de la Compañía de Jesús, el P. Arturo Sosa SJ, ha realizado estos días por diversos lugares ignacianos de Cataluña, en el marco de la celebración del Año Ignaciano. El viernes, en la Basílica de Santa María del Mar, ayer sábado en la Cueva de San Ignacio de Manresa, y hoy en Montserrat.
El P. Arturo Sosa SJ ha sido acogido por el P. Abad Josep M. Soler y la comunidad benedictina, y ha sido invitado a concelebrar la Misa Conventual en la Basílica de Santa María. Al finalizar la celebración ha querido dar las gracias a la comunidad, "que acogió a Ignacio y que siempre ha tenido sus puertas abiertas a los hermanos jesuitas que han venido como peregrinos". También ha invitado a orar por el Papa Francisco y por las vocaciones a la vida cristiana en todas sus formas.
Montserrat es uno de los escenarios importantes en la biografía de Ignacio de Loyola, y celebramos también durante este Año Ignaciano el 500 aniversario del episodio que el peregrino vivió aquí. Fue en marzo de 1522 cuando Ignacio llegó a Montserrat, dejó la espada a los pies de la Virgen de Montserrat y sustituyó la vestimenta de caballero por una tela de saco, símbolo del peregrino.
El Superior General de la Compañía de Jesús ha tenido la oportunidad de visitar algunos de los espacios del Monasterio y el Santuario, acompañado por el P. Ignasi M. Fossas, prior de Montserrat, que le ha invitado a descubrir qué encontró Ignacio a su llegada a la montaña y al monasterio.
Con la jornada de hoy se cierran tres días durante los cuales el P. Sosa ha participado en los primeros eventos del Año Ignaciano en Cataluña, después de su inauguración en Pamplona el mes de mayo.
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