Hace cuatro años que un grupo de músicos vinculados a la pastoral juvenil de los Jesuitas en Cataluña tuvieron la osadía de iniciar la propuesta de las "Canciones a la intemperie". Una propuesta singular, en la que se encuentran la música y la oración, en el marco de la iglesia de los jesuitas de la calle Casp, en la ciudad de Barcelona.
De fondo está la voluntad de ofrecer un espacio de oración dirigido especialmente a los jóvenes y con un tipo de música que habitualmente no se interpreta en las celebraciones religiosas, pero la iniciativa surgió de forma natural, a partir del interés y las ganas de estos jóvenes músicos que participan cada año en la Pascua Joven de Raimat de poderse reencontrar también en otros momentos a lo largo del año.
Declarándose desde los inicios "a la intemperie" los promotores ya avanzaban que se trata de un formato poco convencional, que nos habla de fe y compromiso, y lo hace dirigiéndose a los jóvenes, en el centro de una ciudad secularizada, marcada por el ritmo diario, el consumo y el turismo. Sin embargo, la propuesta se ha ido consolidando a lo largo de este tiempo. Se celebran habitualmente tres ediciones durante el curso y la acogida es buena, con un alto grado de implicación de los participantes.
Cada uno de los encuentros ha tenido una motivación especial: la llamada a la acogida de migrantes y refugiados, el recuerdo del compañero jesuita Marc Vilarassau o de los mártires de la UCA, en el 25 aniversario de aquellos hechos, entre otros.
"Jóvenes y fe, binomio posible"
El próximo encuentro, el miércoles 1 de marzo a partir de las 21: 00h, se presenta con un lema que contradice la incompatibilidad que habitualmente presuponemos entre la juventud y la fe, y llega en el marco de la preparación del Sínodo que tendrá lugar el octubre de este año sobre el tema "Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional".
Siguiendo el título del Sínodo, "en esta ocasión queremos orar por los jóvenes, por sus deistjos y por el interés que hagan real a su vida el sueño para hacer un mundo mejor" -explica Enric Puiggròs, jesuita y uno de los impulsores de las "Canciones a la intemperie" - "y en octubre tenemos previsto dedicar el encuentro al discernimiento vocacional".
