El pasado domingo 27 de octubre la Plaza Antonio Machado del barrio de La Salut de Badalona se llenó con 200 personas para participar y colaborar en la segunda Carrera de Orientación Solidaria organizada por la Fundació Salut Alta y miembros voluntarios del Club de Orientación de Cataluña.
Desde primera hora de la mañana, el barrio acogió a participantes que durante dos horas y media recorrieron el entorno en busca de más de 40 hitos. Con novedades incorporadas como la "zona memorística" y las metas falsas, este año la carrera ha destacado por el carácter inclusivo que ha tenido, incorporando tanto participantes de categorías expertas, como personas procedentes de otras ciudades o barrios que han hecho la carrera corriendo o caminando y, en especial, la participación de equipos de adolescentes y familias del barrio.
Una vez terminada la carrera, se hizo la entrega de los premios a los mejores corredores de cada categoría, con un lote que incorporaba un diploma diseñado por dos adolescentes del proyecto A100, y se sortearon un montón de regalos cedidos por las 20 empresas y entidades colaboradoras.
La Fundació Salut Alta valora que, con esta edición de la carrera, se han alcanzado los objetivos principales propuestos. Por un lado, se ha conseguido la participación de gente externa a la entidad, que han tenido la oportunidad de conocer un entorno cercano pero desconocido para una gran parte de población.
Por la otra, con esta iniciativa se ofrece una actividad de calidad, que promueve la participación comunitaria. Y es que el formato transversal de las carreras de orientación permiten reunir perfiles muy diversos, poniendo en el centro un barrio que, como comenta Maria Nadeu, directora de la Fundació Salut Alta, "a pesar de las dificultades estructurales que sufre la población que vive, tiene mucha riqueza para ofrecer ".
La Fundació Salut Alta, entidad organizadora de esta actividad, forma parte del sector social de la Compañía de Jesús. Tiene por finalidad ayudar en el desarrollo de la población del barrio a través de la educación, ofreciendo especial atención a los niños y niñas y a las personas más necesitadas. Con sus actividades y proyectos, y la participación en plataformas y redes comunitarias, incide positivamente en la realidad, generando procesos personales y comunitarios que rompan el círculo de la exclusión social.
