28 directores de centros de espiritualidad de la Compañía de Jesús en 24 países de Europa y Oriente Medio se han reunido del 13 al 16 de noviembre en el Centro de Espiritualidad Cova Sant Ignasi de Manresa.
Se trata de la primera reunión de este tipo, que ha sido organizada por el presidente de la Conferencia de Provinciales de Europa.
Entre otros temas, se han abordado las necesidades espirituales de la humanidad en el siglo XXI y cómo darles respuesta.
La metodología del encuentro estuvo basada en trabajo en grupos y ponencias. Xavier Melloni sj hizo un diagnóstico de la realidad comenzando con lo que Zygmunt Bauman bautizó como “la sociedad líquida” para, después, analizar el paso del ateísmo al politeísmo, el pluralismo y la espiritualidad sin religiones y la aportación de la identidad ignaciana en nuestros centros.
Precisamente uno de los retos de los centros es, a juicio de otro de los ponentes, Josep M. Carbonell, la necesidad de reconciliar religión y espiritualidad. Desde su experiencia en cuestiones de liderazgo, Ignasi Carreras planteó a los participantes algunas cuestiones estratégicas con una pregunta de fondo: ¿qué y cómo quiero que sea mi centro de espiritualidad de aquí a seis años?
El encuentro también ha servido para que los responsables de nuestros centros de espiritualidad puedan compartir el modo en que viven su responsabilidad así como las dificultades y los retos que afrontan.
Manresa ha sido un escenario privilegiado para realizar esta reflexión y los participantes han tenido ocasión de visitar la Manresa Ignaciana de la mano del director de la Cova, el P. Lluís Magriñà SJ. La próxima conmemoración del Año Ignaciano entre 2021 y 2022 también se ha tratado durante las sesiones.
El próximo encuentro se celebrará el mes de mayo de 2020 en Malta, para profundizar en los temas que surgieron.
