El próximo mes de septiembre, el Centre Internacional d'Espiritualitat Cova Sant Ignasi empieza un nuevo curso, esta vez dirigido a las personas que se encuentran alrededor de los 65 años o que superan esa edad.
Se trata de un programa que propone "asumir creativamente" la llegada a este tramo de la vida y que permite prepararse desde diversas perspectivas. Se hablará, por ejemplo, de la vertiente psicológica y médica, a tener en cuenta para acoger la realidad del propio cuerpo en esta nueva etapa vital, también se ofrecerán propuestas para descubrir nuevas maneras de seguir activos después de la jubilación, todo ello sin olvidar la experiencia espiritual, que ayudará a asumir con vigor estos momentos de cambio.
Para el coordinador de este curso, el jesuita Francesc Riera, esta nueva propuesta de la Cueva responde a la voluntad de ayudar a las personas a tomar las decisiones cuando llega este momento. "En cada etapa de la vida la persona debe tomar sus opciones, hacer su elección, dicho en lenguaje ignaciano. Es evidente que entre los 20 y los 30 años se hacen elecciones importantes sobre cómo conducir la propia vida. También cuando la persona supera los 65 años se situa ante opciones importantes y deberá decidir si desea vivir la vida creativamente, o sólo dejarse llevar por ella."
A pesar de la resistencia que puedan sentir algunas personas ante una propuesta como esta, Riera señala que el curso precisamente propone aparcar la pasividad ante lo que llega y, por el contrario, "situarse en él de una manera creativa". En este sentido, la metodología del curso está marcada por la tradición de Ignacio de Loyola y de sus ejercicios espirituales, que invitan a vivir la vida conscientemente, creativamente y con plenitud. Es uno de los rasgos que da singularidad a este curso.
Una época de gratuidad
Una de las circunstancias de cambio que más inciden en esta época es, a menudo, el final de la etapa laboral. Es uno de los aspectos que se tratará también, ya que, como explica Francesc Riera "se abre la posibilidad de una rica etapa de trabajo entendido de otro modo y que puede ser más gratuito que en épocas anteriores, y se pueden hacer cosas que nunca se habían podido realizar". Una oportunidad quizás de retomar sueños que se habían abandonado o de "ofrecer la propia experiencia vital en varias colaboraciones, voluntariados..., con un altruismo que tantas veces se había deseado."
El programa del curso, que se estrena el mes de septiembre, prevé un mes entero, durante el cual los participantes se alojan en el centro de espiritualidad de la Cueva San Ignacio. Los responsables reconocen que no es fácil poder disponer de un mes completo, pero estamos ante una cuestión vital. Lo demuestra la buena acogida que ha tenido la propuesta: ya hay varias personas apuntadas, procedentes tanto de España como de América Latina y algún otro punto de Europa. Para más información sobre el curso o inscripciones, puede descargar el archivo adjunto.
